La hidroterapia es un tratamiento basado en la utilización externa del agua, tanto en forma líquida como gaseosa, y a temperaturas variables. Esta terapia comprende baños, duchas, chorros a presión, compresas, etc. La aromaterapia y la herboristería se unen frecuentemente a la hidroterapia por el añadido de aceites esenciales o de extractos de plantas medicinales en el agua de tratamiento.
La hidroterapia tiene una influencia beneficiosa sobre nuestra salud gracias a los siguientes tres elementos principales: el calor, la flotabilidad y el masaje. Juntos, ofrecen experiencias que trasmiten ventajas para la salud física que van más allá del descanso y del placer.
Por ejemplo, el agua caliente y el masaje estimulan al cuerpo a liberar endorfinas, que reducen el estrés de forma natural. También ayuda a dilatar los vasos sanguíneos y a prevenir los dolores de cabeza. También actúa sobre los problemas de sueño, ayudando a conseguir un mejor descanso.
La hidroterapia en bañeras con hidromasaje está particularmente recomendada para los atletas, ya que reduce la tensión de la piel y de los músculos, lo que permite una mejor circulación de la sangre. Además, es beneficioso para los músculos dañados ya que un baño con hidromasaje puede aumentar el flujo de sangre cerca de la herida, lo que aportará los elementos nutritivos para ayudar a reparar las heridas.
Sigamos con sus virtudes. Pasemos ahora a los problemas de artritis. La hidroterapia es uno de los métodos utilizados para el tratamiento de la artritis. El calor del agua asociado con la sensación de flotación es ideal para aliviar los dolores de la artritis. La utilización de una bañera con hidromasaje es una parte integrante del tratamiento. También se tratan problemas de diabetes ya que la utilización de un baño caliente hidromasaje reduce la tensión arterial así como la tasa de glucosa en la sangre.
Como vemos son muchas las virtudes de la hidroterapia y muchos los tratamientos que pueden seguirse. Pero nosotros que queremos terminar dando una recomendación. Y es que no debemos seguir ningún tratamiento específico de hidroterapia sin haber consultado previamente a un médico a un especialista. No hacerlo podría ser contraproducente para nuestra salud.
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